Países europeos quieren convertir el mar del Norte en un motor de energía verde
Fuente: Expansión / Reuters
25 de Abril de 2023
El objetivo es frenar la dependencia del gas ruso y reducir el uso de combustibles fósiles emisores de CO2, que siguen siendo dominantes.
Países europeos ribereños del mar del Norte se comprometieron el lunes a aumentar rápidamente la generación de energía eólica marina en la región para reforzar la seguridad energética, en una cumbre celebrada en Ostende, en Bélgica.
Los líderes de siete países de la Unión Europea, entre ellos Francia, Alemania y los Países Bajos, junto con Noruega y Gran Bretaña, que no pertenecen a la UE, se comprometieron a acelerar la construcción de parques eólicos, desarrollar "islas energéticas" y trabajar en proyectos de captura de carbono e hidrógeno renovable.
El objetivo es frenar la dependencia del gas ruso y reducir el uso de combustibles fósiles emisores de CO2, que siguen siendo dominantes. Noruega se convirtió el año pasado en el mayor proveedor de gas de Europa, después de que Rusia cortó los suministros a Europa tras su invasión de Ucrania.
"Debido a la brutal guerra de Rusia contra Ucrania, ha quedado absolutamente claro que necesitamos producir más energía nosotros mismos", declaró la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, quien añadió que la expansión de las energías renovables era crucial para luchar contra el cambio climático.
En una declaración conjunta, los líderes de los países afirmaron que aspiran a alcanzar una capacidad eólica marina combinada de 120 gigavatios (GW) para 2030 en el mar del Norte y los mares septentrionales, incluido el mar de Irlanda, y de 300 GW para 2050.
Esto supondría más que cuadruplicar la capacidad eólica actual de 25 GW en el mar del Norte. Bélgica, Dinamarca e Irlanda, además de Luxemburgo, que no tiene costa, también firmaron el compromiso.
El Reino Unido firmó la declaración, pero el primer ministro, Rishi Sunak, no asistió a la cumbre.
Las decisiones finales de inversión en parques eólicos marinos europeos alcanzaron su nivel más bajo en 10 años en 2022, ya que los promotores se enfrentaron a una inflación récord, tasas de interés al alza y mercados energéticos volátiles.
La UE y Noruega también se comprometieron el lunes a desarrollar infraestructuras de captura y almacenamiento de CO2 procedente de emisiones industriales en yacimientos de gas agotados del Mar del Norte.